Un nuevo encuentro sexual lleva a una sesión en solitario de auto-placer. La anticipación crece mientras explora su coño apretado y mojado hasta llegar a un clímax real y explosivo.
No todos los días logro echarme a patadas y disfrutar de algo de acción en solitario, pero hoy es uno de esos días.He estado anhelando un poco de amor propio, y no me estoy conteniendo.Me complazco con cada sensación, cada toque, cada gemido que se me escapa de los labios.Estoy explorando cada centímetro de mi cuerpo, rastreando mis dedos sobre mi piel, mis pechos, mi estómago y, finalmente, mi palpitante y húmedo coño.Estoy perdido en el momento, perdido en el placer, y no le importa quién mira.No solo me estoy masturbando, estoy experimentando un orgasmo, uno real.Su intenso, su abrumador, y su todo lo que he estado deseando.Es una liberación, una liberación de toda la tensión y el deseo que se han ido acumulando dentro de mí.Y no solo uno, es una serie de ellos, cada uno más poderoso que el anterior.Imago, estoy temblando, estoy completamente perdido en el gusto.Y cuando finalmente termina, me quedé gastado, satisfecho, y listo para más.