Nuestra casa favorita para la diversión traviesa es la de ellos. Nos encanta chupar sus pollas y darles increíbles mamadas. Mira cómo nos turnamos para montar su polla y recibir semen en nuestras caras.
Nada supera una buena follada en tu propia casa, ¿verdad?Entonces, cuando estábamos allí refrescantes, nuestras lenguas comenzaron a bailar alrededor de las gargantas de la otra, dándose las mejores mamadas que pudimos reunir.La acción fue tan caliente, que casi nos hizo olvidar dónde estábamos.Pero luego, como ya estábamos acostados en el sofá, de repente recordamos que ya nos habíamos perdido la verga desde hace bastante tiempo.Y, como la suerte lo tendría, nuestro anfitrión tenía justo lo que estábamos buscando.No perdimos tiempo poniéndola dura y lista para ir, y en cuanto la obtuvimos en nuestras bocas, sabíamos que este era el mejor sexo que habíamos tenido.Lo chupamos hasta dejarlo seco, tomando hasta la última gota de semen, antes de disparar una carga masiva en todas nuestras caras.Fue el final perfecto para una follada perfecta, y no podíamos esperar a hacerlo todo de nuevo.