El video presenta una historia completa con dos jóvenes vestidos con uniformes de policía que son atrapados robando en un centro comercial. Son acusados de cargos impunes y serán procesados en la sala del tribunal en los próximos días. La escena comienza con los oficiales en sus uniformes, custodiando una tienda para un grupo de chicas adolescentes que han robado mercancías. Las chicas se turnan para complacerse mientras el oficial las mira desde su ventana. Una de las chicas se ve con un atuendo pequeño y la otra con un uniforme ajustado, ambas se ven comprando.